LA HISTORIA DEL CABELLO
PREHISTORIA ASIRIA Y PERSIA
Los asirios llevaron los cabellos partidos con raya en medio de la frente y luego echados hacía atrás cayendo sobre los hombros donde formaban una masa redondeada de bucles regulares extendidos en abanico.
Los persas, en cambio, se ensortijaban el cabello cubriéndolo con una toca. Predominaron los cabellos naturales (aun cuando hay constancia de que también conocieron las pelucas) y muy largos, tanto, que es conocido el caso de Absalón al cual el solo hecho de enredarse los suyos en la rama de un árbol fuera de su alcance, para poder liberarse, le costó la vida.
JUDEA Y ASIA MENOR
Loa hebreos se limitaban, sin más, a peinar los cabellos presionándolos después con un turbante. Las hebreas aprisionaban su abundosa cabellera en el interior de una redecilla de mallas de seda y oro a la que complementaban, en su parte externa, con collares de cuentas de coral o imágenes metálicas, habiéndose ungido previamente el cabello con bálsamos y aceites de fuerte penetración aromática, lo que demuestra que la seducción femenina de entonces ya era moderna o bien que la de hoy sigue siendo antigua.
Más adelante los hombres se cortaron, dentro de lo posible, las largas melenas por considerarlo afeminado y estas quedaron limitadas a la juventud, y dentro de lo posible, porque la ley Mosaica tomaba cartas en los asuntos capilares y prohibía cortar el cabello alrededor de las sienes así como prescindir de la barba, ni tan siquiera modificarla y se besaba en señal de respeto.
En asía Menor lo propio era rizarse el cabello y cubrirlo con un gorro redondo que dejaba al descubierto los bucles que caían sobre los hombros libremente trenzados.
o como en el caso de los nazarenos, que era una secta cumplidora tan a rajatabla de esta normativa que tenía por norma no cortarse nunca el cabello en toda su vida. Un nazarista famoso fue el conocido forzudo SANSON, cuya cabellera gigante y larga fue cortada por Dalila cuando dormía, como un sabotaje e hizo que dicho forzudo perdiera su fuerza para poder derrotarlo, como así consta en las Sagradas Escrituras.
esto es solo una parte de la prehistoria del cabello, todavía queda mucho por descubrir de otros lugares como Grecia o Roma. lo haremos más adelante. Un saludo y espero que sea interesante para vosotros.
Como dice el refrán: NUNCA TE ACOSTARÁS SIN SABER UNA COSA MÁS.